La gente que va al rio no esta estratificada, es un lugar donde se camufla desde el más rico hasta el mas necesitado, también es un lugar donde abunda la biodiversidad de colores en las personas, tamaños y formas. Ya que este lugar se ha vuelto un patrimonio de la ciudad y un icono para hacer deporte y encontrarse con la naturaleza.
Hay una anécdota que quiero contarles y es el hecho de que el día que fuimos a Pance alto lleve mi drone para tomar unas fotos desde arriba. Así que cogí el drone y lo eleve unos 20 metros sobre el suelo y en el momento que supero los arboles una ráfaga de viento se lo empezó a llevar hasta el punto de no verlo mas, hasta que perdió la señal y di por perdido mi drone.
Después de estar por varios minutos buscando el drone, me dije que era algo casi imposible encontrarlo, así que pare la búsqueda, y bastante aburrido me devolví a casa.
A los tres días de haber ido al rio, me llega un correo de la empresa DJI (empresa del drone) donde decía que alguien había encontrado un drone con un numero de identificación que correspondía al mío, que si mi drone si estaba perdido por favor llamara a un numero y me daban el nombre de la persona. Al principio no lo podía creer que algo así estuviera sucediendo, pero al llamar a la persona y ver su amabilidad me di cuenta de la calidad de personas que van a estos sitios.
Al otro día me encontré con la persona la cual vivía por arriba de la salida al mar, bastante alejado del rio, el joven devolvió el drone y yo le di un agradecimiento, me sentí muy feliz de volver a ver mi done, ya lo había echado por perdido. Ahí les dejo el video de cuando el drone se pierde.